Cuando nos hacemos pequeñas heridas, como cortes o quemaduras superficiales, es fundamental saber cómo cuidarlas correctamente y qué tipos de apósitos utilizar para acelerar su curación y reducir el riesgo de complicaciones como infecciones.

En este artículo, compartimos consejos prácticos para el cuidado de pequeñas heridas y una guía detallada sobre los tipos de apósitos disponibles y cómo elegir el más adecuado para cada situación. 

Apósitos protectores

Los apósitos protectores son los más utilizados para las heridas menores como cortes, abrasiones y rasguños. Esenciales en cualquier botiquín de primeros auxilios, su función principal es proporcionar una barrera física que proteja la herida de infecciones y lesiones adicionales. Están compuestos por una almohadilla absorbente rodeada de un material adhesivo que ayuda a absorber el exudado de la herida y proporciona protección. Dentro de esta categoría encontramos varios tipos:

Apósitos hipoalergénicos

Estos apósitos están diseñados para personas con piel sensible propensa a irritaciones o con alergias a ciertos adhesivos. Están fabricados con materiales que minimizan el riesgo de reacciones alérgicas.

Apósitos Waterproof

Son impermeables para proteger la herida incluso en contacto con el agua. Son ideales para situaciones en las que la herida puede mojarse, como al ducharse, nadar o en ambientes húmedos.

Apósitos ultra absorbentes

Contienen una almohadilla altamente absorbente que es ideal para heridas por corte o rasguño que secretan una cantidad considerable de fluido. Son especialmente útiles para áreas donde la fricción puede causar más exudado.

Apósitos de sujeción extrema

Estos apósitos están diseñados para mantenerse en su lugar durante actividades intensas y en áreas del cuerpo con mucho movimiento. Su adhesivo es más fuerte y está diseñado para proporcionar protección continua a la herida sin desplazarse.

Apósitos de cicatrización en ambiente húmedo

Los apósitos de cicatrización en ambiente húmedo no solo protegen la herida, sino que utilizan tecnologías avanzadas para promover un ambiente húmedo, que acelera la curación de ciertas heridas. Compartimos lo más comunes: 

Apósitos hidrocoloides

Están indicados para heridas que requieren un entorno húmedo para la cicatrización, o heridas superficiales como cortes, rasguños o rozaduras. Los apósitos hidrocoloides contienen un gel dermo-reconstituyente que, en contacto con el exudado de la herida, actúan como una segunda piel creando un ambiente húmedo que acelera el proceso de curación, evita la formación de costras, reduce el dolor y facilita la cicatrización.

Hidrogeles

Estos apósitos están compuestos principalmente por agua, lo que los hace especialmente adecuados para heridas secas o con poco exudado, como quemaduras leves que afectan solo la capa externa de la piel. Los hidrogeles suelen contener agentes calmantes que ayudan a reducir el dolor y la inflamación y favorecen la regeneración de la piel. 

Películas Transparentes (Films)

Forman un film invisible para proteger la herida y favorecer su cicatrización. Son resistentes al agua y a los roces y permiten a la piel respirar, mientras mantienen la herida protegida y húmeda, optimizando el proceso natural de cicatrización. Este tipo de apósito está indicado en caso de heridas superficiales, cortes y arañazos.

Apósitos de cicatrización específicos para cierre de heridas

Estos apósitos son fundamentales en el manejo de heridas como cortes, que requieren una intervención especial para asegurar un cierre eficaz y minimizar complicaciones.

Apósitos de sutura/strips

Este tipo de apósito cicatrizante funciona como una alternativa a las suturas tradicionales, utilizando tiras adhesivas que mantienen los bordes de la herida juntos. Son útiles para cortes rectos y limpios que pueden beneficiarse de una aproximación de los bordes sin necesidad de puntos. 

Consejos para curar una herida

El cuidado adecuado de una herida es fundamental para asegurar una curación rápida y prevenir infecciones u otras complicaciones. Compartimos algunos consejos prácticos:

Limpieza de la herida

Lava la herida suavemente con agua y jabón para eliminar cualquier suciedad o bacteria. Evita el uso de peróxido de hidrógeno, ya que pueden dañar el tejido sano y utiliza un jabón suave para asegurarte de no irritar más el área lesionada.

Desinfección

Aplica un antiséptico para desinfectar la herida. Los antisépticos como la solución yodada o la clorhexidina son efectivos para matar los gérmenes que pueden causar infecciones. Es importante ser cuidadoso en este paso para evitar causar daño adicional al tejido. Posteriormente, seca la zona con una gasa estéril, evitando el uso de algodón que puede dejar fibras en la herida.

Aplicación del apósito

Una vez que la herida esté limpia y seca, el siguiente paso es protegerla adecuadamente. Elige el tipo de apósito adecuado según el tipo de herida y asegúrate de que el área alrededor esté seca para que se adhiera correctamente.

Cambia el apósito regularmente, respetando su modo de empleo

Observación de signos de infección

Vigila la herida para detectar signos de infección, como enrojecimiento, hinchazón, calor, dolor o secreción de pus. Si observas alguno de estos síntomas, consulta a un profesional de la salud.

La importancia de los apósitos en el cuidado de heridas

El principal objetivo de los apósitos es proteger la herida de factores externos y favorecer la curación. Al seleccionar un apósito, es importante identificar el tipo de herida, la cantidad de exudado, la ubicación de la herida y cualquier necesidad específica de la persona, como la sensibilidad a los adhesivos.

Urgo Apósito Spray Filmogel

Urgo Apósito Spray Filmogel forma un film invisible para proteger la herida y favorecer su cicatrización.  Resistente al agua y a los roces, permite a la piel respirar y optimiza el proceso natural de cicatrización. Su formato en spray está especialmente adaptado a las zonas de articulaciones (rodillas, codos, dedos). 

A partir de 3 años, este apósito spray permite curar las heridas de toda la familia.