Compuestas de queratina, las uñas desempeñan un papel importante en la protección de los dedos de pies y manos, así como en su movilidad y la pisada. Sin embargo, son frágiles y susceptibles tanto a las infecciones fúngicas, que afectan a casi 1 de cada 10 personas y que se conocen como hongos en las uñas u onicomicosis, como a pequeños traumatismos. Puedes encontrar aquí algunos consejos valiosos y útiles para la prevención y el tratamiento de los hongos en las uñas.

Para ti, algunos consejos simples y eficaces

Limpia bien tus pies después del baño o la ducha

La maceración y el calor húmedo son factores que favorecen el desarrollo de hongos y, por tanto, de micosis. Procura evitar los baños demasiado prolongados, ya que pueden debilitar la piel y favorecer la aparición de infección por hongos. Es importante secarse bien los dedos y los espacios interdigitales después de la ducha o el baño para proteger los pies y prevenir las infecciones, que pueden producirse tanto debajo de la uña como entre los dedos. En este caso, se denomina intertrigo interdigital (pie de atleta).

Limita la transpiración de los pies

La transpiración de los pies provoca maceración. Para limitar esta transpiración, cámbiate de calcetines todos los días y, si es posible, elige fibras naturales como el algodón, que ayuden a absorber la humedad en verano. Si practicas deporte, elige calcetines de un material transpirable y adaptado a tu deporte. La lana, por ejemplo, es un material termorregulador, perfecto para deportes de invierno como el esquí. Una vez terminada la sesión o entrenamiento, procura ducharte y cambiarte rápidamente de calcetines para limitar la maceración. Para el día a día, otros materiales como el lino o la cachemira pueden disminuir el exceso de transpiración y mantener los pies secos.

Cuida tus manos y pies

Algunos gestos que realizamos en el día a día contribuyen a menudo a debilitar las uñas. Para evitar la aparición de hongos, recuerda recortar las uñas con regularidad. Así reducirás el riesgo de presión y rotura, que facilitan la aparición de los hongos. Limita también el uso de esmaltes y quitaesmaltes, y protege las manos si utilizas productos de limpieza agresivos. Por último, no utilices desinfectantes ni lejía para limpiarte los pies: podrías dañar la flora cutánea que protege tu piel. Las manos y los pies rara vez son una prioridad en nuestra vida cotidiana, pero considera la posibilidad de cuidarlos más para mantenerlos sanos.

Elige el calzado adecuado

Los hongos también pueden transmitirse por contacto con zonas contaminadas, lleva siempre un calzado protector o chanclas si vas a estar en zonas que puedan estar contaminadas: piscinas, gimnasios, saunas. En estos lugares, procura llevar sandalias o chanclas para limitar el contacto con el suelo. Una buena elección del calzado en la vida cotidiana puede limitar el riesgo de hongos o traumatismos leves en las uñas.  Procura no llevar zapatos de materiales sintéticos o plásticos que favorezcan la transpiración. Por último, evita los zapatos frágiles o demasiado pequeños, que no protegen suficientemente los pies de los golpes o roces y que podrían dañar la uña. En su lugar, opta por zapatos abiertos o lo más aireados posible, y evita llevar el mismo calzado dos días seguidos para dar tiempo a que se evapore la transpiración.

Cuida tu calzado para evitar que proliferen hongos

Cuando una de tus uñas se infecta con hongos, éstos contaminan tu calzado y pueden sobrevivir hasta 20 meses¹. Recuerda limpiar regularmente tus zapatillas de deporte, que pueden retener bacterias y hongos después de varios usos. Para evitar la recontaminación y la contaminación de otras uñas, es importante proteger los pies y el calzado.

Utiliza un spray fungicida para evitar el desarrollo de hongos

Para asegurar una correcta higiene de la piel, es importante utilizar un antiséptico para piel sana como Urgo Spray Fungicida

Disminuye el riesgo de contaminar tu entorno

Cuando se tiene micosis en las uñas, las superficies que se tocan pueden volverse contaminantes. Por tanto, evita compartir toalla con otra persona. Los hongos son muy contagiosos, por lo que utilizar tu propia toalla reducirá el riesgo de infectar a otros. Es aconsejable también utilizar una toalla sólo para los pies. Durante el tratamiento de los hongos en las uñas, asegúrate de lavar regularmente las toallas, las alfombrillas de baño y los calcetines a 60°C en la lavadora. Estos lavados a alta temperatura erradicarán los hongos que causan la infección.

Para volver a tener unas uñas sanas y bonitas…

En URGO te ofrecemos soluciones para el tratamiento de uñas dañadas y onicomicosis. En el caso de uñas dañadas por hongos o traumatismos, URGO Uñas Dañadas Filmogel®  es el tratamiento de referencia fácil y rápido de usar: una aplicación al día, sin necesidad de limar la uña. Esta solución en forma de apósito líquido limpia, regenera y protege las uñas.

Si lo que buscas es tratar los hongos y camuflar tus hongos de forma inmediata, prueba URGO Anti Hongos Treat &Color Filmogel®.Su fórmula trata el hongo a la vez que cubre su antiestético aspecto.

Cuanto antes se traten los hongos de las uñas, más eficaz será. Controla regularmente el aspecto de sus uñas para reconocer los signos de infección. Se considera que la uña está curada cuando ha vuelto a crecer sana y completa. El tratamiento de los hongos en las uñas de los pies dura aproximadamente 8 meses, y 4 meses en el caso de los hongos en las uñas de las manos. Así que sea paciente y respete el tiempo de tratamiento.

Urgo Anti Hongos Treat & Color Filmogel®

URGO Anti Hongos Treat&Color Filmogel a base de Olile-Active^TM, un ingrediente patentado de origen natural. Forma una película de color que enmascara y trata los hongos de las uñas con una cobertura nude.

La solución para cubrir los hongos de las uñas de forma inmediata y mejorar su aspecto estético.

Compra ahora