¿Por qué salen las grietas en los talones?

Las grietas en los talones son el resultado de una piel seca y deshidratada. Esta afección puede ser causada por diversos factores, tanto internos como externos, que afectan la salud y la hidratación de la piel de nuestros pies. Algunas de las causas más comunes incluyen:

Falta de Hidratación

Durante el verano, nuestras actividades al aire libre aumentan significativamente, lo que puede llevar a una mayor pérdida de humedad en nuestra piel. Si no reponemos adecuadamente esta humedad bebiendo suficiente agua y aplicando productos hidratantes en nuestros pies, la piel tiende a secarse y agrietarse.

Exposición al Sol y Calor

La radiación solar intensa y el calor del verano pueden causar daño a la capa externa de la piel, debilitándola. La piel se vuelve más propensa a secarse y formar fisuras, especialmente en áreas como los talones, que soportan la presión constante al caminar.

Calzado Inadecuado

El uso frecuente de sandalias y chanclas puede hacer que los talones estén más expuestos y propensos a la sequedad. Además, el roce constante entre los pies y el calzado puede provocar la acumulación de células muertas en la piel, creando un ambiente propicio para la formación de grietas.

Falta de rutina de cuidado

La falta de una rutina de cuidado personal adecuada puede exacerbar el problema de las grietas en los talones. Ignorar la exfoliación, la hidratación regular y el uso de productos específicos para los pies puede contribuir a la sequedad y, en última instancia, a la formación de fisuras.

Cómo combatir las grietas en talones durante el verano

Existen algunos tips que puedes añadir a tu rutina para combatir las grietas en los talones durante la temporada de verano:

Hidratación Constante

La hidratación es clave para mantener la piel de tus talones suave y saludable. Beber suficiente agua durante el día no solo beneficia a tu piel, sino a todo tu cuerpo. Además, aplica una crema hidratante para los pies todas las noches antes de dormir.

Exfoliación Regular

Realiza una exfoliación suave en tus pies una vez a la semana para eliminar las células muertas de la piel. Esto ayudará a mantener la piel más receptiva a la hidratación y reducirá la acumulación de material que puede contribuir a las grietas.

Uso de Calzado Adecuado

Si bien las sandalias son la elección preferida en verano, intenta alternar con zapatos cerrados de vez en cuando para proteger tus pies de la exposición constante al sol y al roce directo. Además, elige sandalias que proporcionen un buen soporte para tus pies y que no causen fricción excesiva.

Baños de agua templada

Sumergir tus pies en agua tibia con un poco de sal marina o aceites esenciales puede ser una excelente manera de mantener la piel hidratada y relajarte al mismo tiempo. Este sencillo ritual puede ayudar a suavizar la piel y prevenir la formación de grietas.

Una vez hayan aparecido las grietas podemos tratarlas con productos específicos, y en casos más graves o de que la patología persista, derivar al dermatólogo.